Se me han acabado las cuchillas de afeitar y la que tengo está verdaderamente gastada; pero es recargable y he ido a la droguería a por un recambio.
-Por favor, ¿me da unas cuchillas Gillette de tres cuchillas?
-Por supuesto, caballero. ¿Cuáles usa usted?
-Ya le he dicho, Gillete de tres cuchillas.
-¿M3 Power?
-Pues sí, esa debe ser...
-Esa es para unas maquinillas que llevan pilas para hacer vibrar los filamentos cruzados que permiten un mejor apurado.
-Pues no. Mi maquinilla no lleva pilas.
-Debe ser la Turbo o la normal. ¿Sabe si las cuchillas que usa son de las que tienen una banda jabonosa de Aloe con Vitamina E?
-Por favor, dígame que es broma, que me están grabando con cámara oculta o algo así.
-No es broma, caballero. ¿Recuerda si las cuchillas se desprenden del mango apretando por arriba o por los lados?
He ido a casa y he vuelto con el mango de las cuchillas. Ocho recambios me han costado 19,50 euros. He maldecido el día en que abandoné las de dos cuchillas de usar y tirar, aunque reconozco también que he echado un vistazo a la nueva Fussion: tiene como cinco cuchillas y es la maquinilla que utilizan Federer, Henry y Tiger Woods. ¿Qué pasaría si los tres dijeran en un anuncio que utilizan a diario dos horitas el cilicio y les va fenómeno?