jueves, 30 de marzo de 2006

Curva peligrosa


A veces viene una curva peligrosa, a veces una sucesión de curvas peligrosas, incluso hay señales como la de la foto, que te advierten de que lo de las curvas peligrosas va a durar unos cuantos kilómetros.
Así amaneces uno a veces, preparado para someterse a una sucesión de peligros en forma de curva. En lo profesional, en lo familiar, en lo personal, no todo es llano y apacible. Tal vez termine mareado. Se pasará... Y llegarán las rectas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Las curvas de la vida, buena imagen.
No sé cuál es tu caso, pero en general, ¿no crees que el riesgo que hay en uno de esos giros puede ser mucho mayor que el de acabar mareado?
Cuando dices que ya se pasaran... ¿qué me cuentas del sudor que uno tiene que poner muchas veces para salir airosos de uno de esos laberintos? Aunque un tipo como tú también podría contar algo sobre como en esos momentos, aunque parezca lo contrario, uno ve que no está solo.
By the way, la vida en línea recta sería un aburrimiento, y con eso no tendrías un buen blog.