Voy a salir a ver la ciudad desde un alto al que no se podía ir estos días por las lluvias, pongo cuatro fotos. Las tres primeras son de degustaciones callejeras. De igual forma que en el carrefour los sábados por la mañana hay azafatas que te dan a probar queso de Burgos, filetes de carne de canguro o alimentos dietéticos de última generación (mi sobrina Isa, por ejemplo, repartió vasitos de sopas de sobre en el Jumbo cuando era joven), aquí ocurre algo semejante, pero por las calles comerciales del centro. En la primera foto degusto un poco de KAKUNI (textualmente “comida cuadrada”, al paladar como unas magdalenas rellenas de panceta en salsa, sin nada que destacar al retrogusto), en la segunda TÉ verde y en la tercera unos fiedos japoneses llamados SOOMEN. Todo muy rico, pero la cervecita tienes que ponerla tú.
La cuarta foto la pongo para demostrar que no soy un asno absoluto: la hice ayer en la puerta de entrada del Castillo de KUMAMOTO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario