Cada año es cada año. En 2017 la fiesta de San José cae en domingo y el que tenga costumbre de vivir la devoción de los siete domingos de san José tiene que ponerse hoy en marcha.
Hay muchos devocionarios con sugerencias para seguir los dolores y gozos de San José, en la web de san Josemaría se explican los orígenes de la devoción y se facilitan enlaces para vivirla.
Francamente, antes de leerlo ahí, yo no sabía que fue Pío IX el que dio a esta devoción "actualidad perenne con su deseo de que se acudiera a San José, para aliviar la entonces aflictiva situación de la Iglesia universal."
"Aflictivo" es "que causa aflicción". Me conmueven los remedios para las situaciones aflictivas, más si están recomendados por un Papa, y más si se trata de conseguir una "actualidad perenne", sugerente oxímoron.
Total, que otra cosa tal vez no, pero rezar a san José siete domingos creo que aguanto. A ver.
No tengo a mano fotos de san José. Ya he puesto en el blog otros años y no quiero repetirme. Pongo una de claro oxímoron visual.
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