No sé por dónde empezar.
Me dijo el otro día uno que no entendía este blog, que no tenía mucha lógica que se llame http://opusdeidesdedentro.blogspot.com.es y que contenga historias de paellas y de juegos de palabras.
Hace mucho que no digo nada sobre eso, ni sobre el origen de este blog, ni sobre el hecho de que soy del Opus Dei y cuento cosas de lo que hago. Punto. O sea, ni el blog es oficial, ni yo soy portavoz de nada: simplemente soy del Opus Dei, y hago cosas y las cuento.
Creo que los blogs en general no tienen mucha lógica....
Y ya me he cansado de escribir sobre esto.
Puedo decir que he estado esta tarde en una charla en el colegio Aldovea con cerca de 20 humanos sobre la Cuaresma del año de la Misericordia. Luego me he acercado a recoger una cacerola al club Codec: me han atendido con prisa porque estaban pendientes de una conexión por vídeo conferencia con la Antártida. La cacerola la necesito porque hago de pinche el domingo en un evento que parece una excursión campestre para familias del club Jara, pero en realidad es la fiesta de cumpleaños de mi amigo Deivid, casado con Cristina: una de las parejas con más glamour de Algete y su comarca.
Por lo demás, la foto es de un parche.
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