domingo, 1 de mayo de 2016

El día de la madre


He dado un  paseo por el campo, que está verde y reventón, y he capturado unas pocas senderuelas. Pero no las he fotografiado, por humildad.

De mi extraño archivo fotográfico pongo, a propósito de las setas y sus peligros, una curiosa pieza de señalética gallega.

Hace poco, hablando del precio de una casa, alguien añadió que había que tener en cuenta que se trataba de un inmueble con portero físico. Hoy es mi primer día de la madre sin madre física. No me siento nada huérfano y noto que estoy más cerca de ella que nunca —aparte de la otra gran Maternidad, que no sólo se celebra un día sino durante todo el mes—, pero aunque estos días de la madre, del padre y de los enamorados suenen tan comerciales como el black monday el big friday, las rebajas o la semana fantástica... terminas pensando que lo del día de la madre es algo más.
En fin, que la sensación es novedosa. Lo de tener a tu madre ya en el Cielo, digo. Y no se me ocurre no regalar algo, claro.

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