viernes, 1 de mayo de 2015

Fin a ocho años de estrecha relación


Desde 2007 a 2015 he tenido dentro de la boca este puente de la foto. Primero fue de tres piezas, luego de cuatro. Fue duro acostumbrarse, parecía que nunca íbamos a dejarlo, pero al final me he tenido que pasar a los implantes.

Son momentos de la vida en los que uno se replantea lo más esencial y para los que viene tener a mano sabiduría como la que se encierra en las obras de Brian O'Nolan:

“Haga siempre cualquier pregunta que tenga que hacer y no responda ninguna.
Aproveche en su interés todo lo que oiga.
Lleve siempre consigo material de repuesto.
Gire a la izquierda el mayor número de veces posible.
Nunca frene primero con el freno de delante.
—Si sigue estas reglas salvará su alma y nunca sufrirá una caída en carreteras resbaladizas."

Ale, a por los implantes.

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