Iba yo a la Biblioteca Nacional dispuesto a sacarme mi carné de investigador para bucear en microfilms de prensa del siglo XIX con los que dar rienda suelta al investigador que llevo dentro. Hace falta para eso reunir unos requisitos, que reúno; y rellenar unos formularios, que he rellenado. Entonces ha llegado el momento de las fotos. "Ya está -me he dicho-, algo tenía que faltarme. Voy a tener que ir a casa a por unas fotos"; pero no. La eficaz señorita que me ha atendido me ha dicho: "Póngase delante de la cámara" y en ese momento, he caído en la cuenta de la cámara rodeada de cables que sale en la foto de hoy. He salido en el carné con más cara de ogro de la que tengo en la realidad -que ogrunamente hablando no está mal, todo hay que decirlo-, pero me he ahorrado un viaje a por fotos. Hay que ver cómo adelantar los ciber-tiempos. Cualquier día, nos bajaremos directamente nuestras fotos de sitios tipo wikipedia a través de dispositivos inalámbricos municipales telepático telegráficos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario