He tenido problemas. El blog no se cargaba bien. Pensé que era problema del ordenador y, tras hablar con varios expertos, he borrado la memoria caché de mi navegador, he revisado los últimos cambios de la plantilla, he descubierto que se veía mal también desde otros ordenadores, he borrado la entrada de ayer, he comprobado si esto podía tener que ver con el nuevo dispositivo que ofrece blogger para hacer las entradas en beta, con algo que viene en wikipedia... Y nada.
Al intentar rehacer todo lo que había hecho, he descubierto que podía reponer la entrada de ayer, pero no los cinco comentarios que había recibido (contenían un interesantísimo cambio de impresiones sobre si se dice o se debe decir Lejona o Leioa, pero no consigo republicarlos).
Finalmente, he quitado el contador de visitas on-line y el marcador que decía cuánto tiempo llevaba uno en el blog... y ahora funciona todo como el primer día: sospecho que el problema estaba en el contador de visitas on-line; pero no pienso comprobarlo. El caso es que ahora funciona.
Pongo foto de la sala de ordenadores y microfilms en la que estuve dejándome los ojos en la Biblioteca Nacional. Lo hago para demostrar que este numerario del Opus Dei es bastante inútil con los ordenadores y ha estado apunto de cargarse su propio blog; pero en los ratos libres soy investigador, que no es poco.
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