Como hoy las fotos entran de cine, aprovecho para poner esta del mostrador de venta de cintas de la Virgen del Pilar. Está en la sacristía de la Basílica de la Virgen del Pilar, claro; y no sé si lo conté, pero compré tres la última vez que pasé por allí, las dejé a un lado para hacer esta foto... y allí se quedaron. Si es que no se puede tener la cabeza a la vez en dos sitios.
1 comentario:
Es curioso la cantidad de gente que cuelga esas cintas en los retrovisores.Y apuesto a que ni siquiera practican. Somos muy miserables con ese amor por conveniencia a la Virgen... pero más vale eso que nada.
Yo la llevo amarilla ;-)
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