Efectivamente, no llevaba encima más que el DNI, que propiamente no me parecía una tarjeta.
-Ya has reconocido una, me ha dicho el más esceptico de los que me escuchaban.
-No tengo ninguna más, he afirmado rotundo y convencido, ni la de VIPS, ni la de Repsol, ni la de Iberia Plus, ni VISAS ni nada de nada.
-Vale, se ha sonreído, mi amigo. Llegas a casa, buscas en los cajones, pones todas en la mesa, haces una foto y la pones en el blog.
Dicho y hecho: como puede apreciarse, no tengo tarjetas más que la del club de moteros al que pertenezco para abaratar el seguro de la moto, la de las bibliotecas de la Comunidad de Madrid, el video club, donantes de sangre, Club Altamira, Seguridad Social, Biblioteca Nacional y Makro. Es decir, aparte del DNI tengo 8 tarjetas... y lo peor es que estoy convencido de que no tengo ninguna.
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