Hoy es Santa Catalina de Siena. Tengo mucha devoción a esta santa analfabeta, sabia y doctora de la Iglesia, que es intercesora del Opus Dei para lo referido al apostolado de la opinión pública (lo que quiere decir resumidamente que la gente del Opus Dei le pide especialmente que interceda para que los periodistas sean veraces a la hora de informar sobre el Opus Dei). He rezado alguna vez ante sus restos, que están en el altar de la iglesia de Santa María sopra Minerva, en Roma; pero hasta este último viaje a Roma no había caído en la existencia de la estatua que saco en la foto, que está en los jardincillos esos que hay entre el Castel Sant'Angelo, el Tíber y el arranque (o el final, según se mire) de la avenida de la Conciliazione.
Pues eso: Santa Catalina, ruega por nosotros.
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