Estaba esta tarde esperando mi turno en un taller de motos como el de la foto cuando ha comenzado a sonar el paso de coches de fórmula uno. Han pasado tres o cuatro, no sabía yo por dónde, cuando uno de los que esperaba ha descolgado el móvil: tenía el ruidito como melodía para avisar de la llamada.
Tengo un amigo que tiene ruidos de animales que cambian en función de quién llame: su novia es el trino de unos pajaritos, un amigo común un mugido de vaca, su jefe un rebuzno... Nunca me he atrevido a preguntar cómo suena cuando yo llamo. Desde entonces procuro llamarle a teléfonos fijos.
Más: mi calendario taco del Sagrado Corazón habla hoy de especies descubiertas en los últimos cien años, como el tiburón bocagrande, el guepardo real, el gorila de montaña, el muntjac gigante, el sao la, el titi mermelada, el mono del Brasil y el snubfin. Asombroso.
¿Más? Si, hoy hemos tenido retiro trimestral para los supernumerarios de mi Centro del Opus Dei.
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