¿Para qué llevamos una vela? Buena pregunta. Cualquiera que viera alguna imagen de la retransmisión de la vigilia de Marienfeld, sabe que las velas jugaron un papel importante en la escenografía de ese acto. Cualquiera que estuviera atento al contenido de lo que se hacía en cada momento sabe también lo que decía la guía: "Cada uno de vosotros ha recibido la luz que en la tarde ha sido traída aquí a Marienfeld. Esta misma luz, en el adviento del año 2004, llegó desde Belén a Europa y a Alemania. Desde hace casi 20 años, esta luz es traída directamente desde la gruta de Belén por jovenes scouts y repartida en más de 25 países europeos. La luz nos recuerda que en Belén nos ha nacido el Príncipe de la Paz que nos exhorta a vivir en paz. Sobre la copa de vuestra luz veis puntos luminosos. Uno de ellos tiene la forma de la estrella. Por favor: llevaos estas copas a casa, a vuestras familias y a vuestras parroquias. Que os sirvan para recordar a Cristo, al que habéis recibido como la Luz del Mundo; como la luz que ilumina vuestras vidas y que quiere liberar de la oscuridad vuestros corazones y los corazones de toda la humanidad".
Hoy es 15 de septiembre y antes de que este blog personal se me convierta en un diario histórico, quisiera decir que hoy es la Virgen de los Dolores y hace 30 añitos justo tal día como hoy don Álvaro del Portillo sucedió a San Josemaría al frente del Opus Dei. Este tipo de efemérides son motivo de cierta fiesta, de cierta celebración entre la gente de la Obra. Los aniversarios son bonitos. también son bonitos los días grises del los meses grises, los días de "no cumpleaños" de Alicia en el País de las maravillas. Es bonito todo. VIVA DON ÁLVARO DEL PORTILLO.
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