Así de nevada luce la Mujer Muerta, el imponente monte segoviano que siempre me ha dado bastante miedo. Ya está bien de dedicar los viernes a viajes al extranjero: hoy salimos a lo que es Castilla León.
El otro día dije alguna simpleza acerca de Siete Picos, nombre con el que casualmente se designa un conjunto de siete picos. Conozco un sacerdote que vive en Tenerife y es extraordinariamente simpático que tiene una teoría muy interesante sobre los apellidos de las personas: dice que nunca coincide el significado con la persona a la que se refiere. Ciertamente, el más facha de mis amigos se apellida Rojo, hice el bachillerato con un García Delgado que estaba bastante relleno, y así sucesivamente: Bajo suelte ser alto, Moreno rubio, Fuertes debilucho, etc. No sé que tiene que ver esto con la Mujer Muerta, pero la foto es imponente.
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